El bestiario de Thierry Mugler: couturissime, la exposición homenaje

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Llegada desde Montreal a las calles de nuestra capital, Couturissime rinde un impresionante homenaje al trabajo de Thierry Mugler. Una exposición que tuvimos la suerte de descubrir y de la cual compartimos nuestras impresiones a continuación.

Thierry Mugler, el artista

A menudo conocido por sus encantadores perfumes, como su icónico Angel, esta exposición pone de relieve toda la paleta creativa de Thierry Mugler. Alta costura, puesta en escena, fotografía, video, perfume, danza… Visionario creador francés, ha logrado establecerse entre los más grandes con un arte que se pretende pluridisciplinario. Una oportunidad perfecta para descubrir su imaginario proveniente de otra dimensión a través de cientos de piezas, la mayoría de las cuales nunca han sido expuestas.

Una visión singular de la moda

Thierry Mugler llegó a un punto de inflexión en la historia de la moda en París. En una época en la que ciudades como Nueva York y Milán estaban en auge y demostraban un gran savoir-faire, el diseñador llamó la atención junto con sus colegas por parte de la cámara sindical de alta costura. En una época en la que François Mitterrand devolvió a la moda un estatus de «arte mayor«, transformando así a París en la capital de la moda, el diseñador aporta su mirada fresca e innovadora.

A diferencia de otros diseñadores que se centran en modelos que pueden acompañar a diario a hombres y mujeres, Thierry Mugler se eleva al estatus de creador de piezas que podríamos llamar «eventuales». Sus piezas transforman las siluetas humanas en criaturas sagradas. Portadas de revistas, sesiones de fotos, videoclips, fiestas temáticas, trajes de escenario o de estrenos… Estas piezas crean espectáculo, fusionando lo humano con lo animal.

De hecho, en esta exposición descubrimos toda la inspiración que el diseñador encontró en la silueta humana para transformarla y convertirla en criaturas animales. Fascinado por el cuerpo, las texturas, el movimiento… Las siluetas de hombres y mujeres vistas por Thierry Mugler parecen surgir de una crisálida con rasgos de reptiles, pájaros, insectos o mariposas… Ajustándose a las curvas de los cuerpos, los cortes ceñidos o asimétricos cambian su apariencia, transformándolos en bestias de otro mundo. Con un espíritu místico, mitológico, maléfico e incluso erótico, entramos en la mente, poco común, de este diseñador.

El baile de texturas

Entre las piezas expuestas, descubrimos dos colecciones impactantes: Los insectos y Los atlantes, que destacan a las ninfas acuáticas.

Más allá del impresionante encuentro con la atmósfera que emanan las piezas, especialmente cuando se colocan unas al lado de las otras, quedamos deslumbrados por su diseño y la minuciosidad de los detalles.

Observamos el trabajo realizado por Thierry Mugler con materiales sintéticos para recrear escamas, plumas, junto a miles de cristales y diamantes, y largos de crin interminables… Cada pieza irradia un imaginario increíble, pero también un notable savoir-faire. Los cortes de los corsés recuerdan las espaldas de los insectos, mientras que las costuras y aristas afiladas dan la ilusión de branquias de pez. Se pueden apreciar técnicas innovadoras, como el organza plisado. Más allá del dominio, hay un aspecto lúdico en el que se puede observar un verdadero trabajo creativo.

Ya sea que apreciemos o no los modelos, no podemos dejar de impresionarnos por el trabajo de creación y diseño. Cada atuendo está pensado en cada detalle, hasta el bolso en forma de caballito de mar o las orejeras puntiagudas. Las piezas que visten las cabezas y los rostros rompen límites, creando una frontera difusa entre lo animal y lo humano.

Estas piezas sacan a relucir cada uno de los instintos animales que dormitan en nosotros.

Una escenografía desconcertante

Escenificada en parte por Rodeo FX de Montreal, la exposición pretende ser inmersiva. Pasamos de un universo a otro con una sensación muy particular. Todas las piezas de universos tan fantásticos, colocadas una al lado de la otra en decorados atemporales, nos transportan a otra esfera. La de Thierry Mugler. El recorrido por la exposición es impactante, generando una cierta incomodidad por la acumulación de piezas tan poco comunes, y afecta a cada espectador, ya sea que le guste o no el trabajo del diseñador.

Rodeadas de otros grandes nombres del arte, sus piezas han encontrado su esplendor a través de series de fotos realizadas, entre otros, por Helmut Newton o David LaChapelle. Pero también a través de videos que acompañan la visita.

Si eres tan aficionado como nosotros a las exposiciones de moda, te recomendamos visitar el Museo Yves Saint-Laurent en París. Ofrece exposiciones variadas sobre el trabajo del diseñador, donde podrás descubrir su taller.

En cuanto a la agenda, también puedes visitar en París la exposición «Una historia de la moda» en el Palais Galliera, hasta el 26 de junio.