Doble desmaquillado: el ritual de belleza que lo cambia todo
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Te desmaquillas todas las noches (¡espero que sí!), pero ¿es realmente suficiente para limpiar tu piel en profundidad? El doble desmaquillado se ha convertido hoy en día en una etapa esencial para obtener una piel sana, radiante y sin imperfecciones.
Con la tendencia de las rutinas de cuidado de la piel, algunas prácticas de otros lugares se han convertido en imprescindibles. Este es el caso del doble desmaquillado, una técnica inspirada en los rituales japoneses que promete una piel más hermosa y luminosa gracias a una limpieza meticulosa. Desglosamos un método que atrae tanto a los amantes de la belleza como a los dermatólogos.
¿Qué es el doble desmaquillado?
Como su nombre indica, el doble desmaquillado consiste en limpiar la piel en dos tiempos con dos técnicas diferentes para limpiar en profundidad sin agredir la piel. Se compone de 2 fases: el desmaquillado con aceite y con agua.
La primera fase: el desmaquillado con aceite
No estamos acostumbrados a usar aceite desmaquillante en Occidente, a diferencia de las japonesas. Sin embargo, el aceite es mucho más suave para la piel que el agua micelar o la leche desmaquillante y, sobre todo, es adecuado para todos los tipos de piel, incluso para las pieles grasas.
He adquirido el hábito de comenzar mi desmaquillado masajeando mi rostro con aceite (bio si es posible) porque los cuerpos grasos que contiene permiten atraer partículas grasas como la contaminación, el sebo, el protector solar o incluso el maquillaje. Los residuos de impurezas se disolverán en el agua y dejarán tu piel limpia, lista para pasar a la etapa número dos: la solución acuosa.
La segunda fase: el desmaquillado con agua
Cuando comienzas esta segunda fase, tu piel ya está bien limpia, y solo te queda eliminar las últimas pequeñas impurezas y los residuos de aceite. Si tienes la piel grasa, no te preocupes: el aceite desmaquillante no deja una película grasa en tu piel, y puedes adoptar el doble desmaquillado sin temor.
Una vez que hayas retirado el maquillaje, elige un gel espumoso o una gelatina a base de agua para finalizar. Te aconsejo que priorices productos saludables, bio si es posible, y minimalistas, especialmente si tienes la piel sensible.
¿Por qué adoptar este método?
- Para cuidar de uno mismo
A veces, tendemos a considerar el desmaquillado como un paso obligatorio y algo tedioso que buscamos completar rápidamente por la noche. Sin embargo, al cambiar nuestra perspectiva, esta rutina puede convertirse en un verdadero momento de bienestar: tomarse el tiempo para masajear el rostro, apreciarse frente al espejo, o incluso practicar unos minutos de yoga facial, si eso te inspira.
- Una mejor absorción de los tratamientos
Piel sin residuos = piel lista para absorber los tratamientos. La fórmula es simple: si tu piel está perfectamente limpia, estará más capacitada para recibir los beneficios de tus tratamientos, siempre y cuando, por supuesto, elijas bien tus sueros y cremas. Nuevamente, asegúrate de revisar cuidadosamente la composición de los productos que aplicas en tu piel.
- Una piel más limpia
El doble desmaquillado tiene un efecto visible: hace que la piel esté más limpia y luminosa al deshacerse de toda impureza acumulada a lo largo del día.
Mis consejos para un doble desmaquillado exitoso
- Tómate tu tiempo: masajea tu aceite sobre la piel seca realizando movimientos circulares para disolver bien las impurezas y favorecer la circulación.
- Enjuaga con agua entre cada etapa : esto permite, además de hidratar tu rostro, enjuagar el resto del maquillaje o las impurezas restantes.
- Adapta los productos a tu tipo de piel : si no estás segura de conocer tu tipo de piel, existen pruebas en línea para saber si es grasa, normal o sensible.
Imagen principal: Fleur Kann/Unsplash