Mantener tus buenos propósitos en 2024, ¡es posible!

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Comer mejor, hacer más deporte… Conocen la canción, todos queremos cumplir nuestras buenas resoluciones al inicio del año, pero a menudo, después de unas semanas, ya queremos abandonarlas. Personalmente, ya no cuento las resoluciones que nunca he cumplido: una dieta 100% vegetariana, meditar 10 minutos por la mañana, apagar mi teléfono después de las 21 h… todo acabó en un dejarse llevar progresivamente.

Pero aquí estamos, a veces estamos realmente motivados y este año, prometemos mantener nuestros objetivos!

Para ayudarte a mantener tus buenas resoluciones, comparto contigo los mejores consejos de productividad que aportan satisfacción. Así que, ¡mantente firme y te deseo un muy feliz año 2024!

1. Cumple tus buenas resoluciones en 21 días

21 días es el tiempo que necesitaría el cerebro para adoptar un nuevo hábito. Si este período varía según las personas, es cierto que es completamente posible mantener una buena resolución practicando diariamente.

Es el cirujano plástico Maxwell Maltz quien, en los años 60, estableció esta observación de los 21 días. Este concepto a veces es criticado, se trata sobre todo de crear un hábito «hackeando» el cerebro para que ejecute una acción de manera más automática.

Si bien esta teoría nunca ha sido probada científicamente, los expertos coinciden en que después de algunas semanas, el nuevo hábito ha sido registrado por tu cerebro.

Por lo tanto, debes mantenerte motivada las primeras semanas para cumplir tus buenas resoluciones.

2. Nos concentramos en objetivos realistas

Fijarse objetivos imposibles es la primera razón para abandonar una buena resolución. Así que, si tienes el mismo objetivo cada año pero no logras mantener el ritmo, puede que sea demasiado ambicioso. No hay nada de malo en revisar una resolución a la baja, al contrario.

Es mejor terminar un pequeño proyecto que te haga sentir orgulloso que dejar caer una buena resolución irrealista.

Objetivos irreales van a perjudicar tu confianza y te dejarán un sabor amargo el resto del año.

Antes de fijarte objetivos, evalúa tu planificación, el tiempo que deseas dedicar a tus proyectos y sé realista y honesto contigo mismo, es la mejor manera de alcanzar el éxito.

3. Conocemos nuestras prioridades

No todas las buenas resoluciones son iguales. Algunas son objetivos de vida (ej: escribir un libro, iniciar tu propio negocio), otras son imperativas (ej: aprender una nueva habilidad para conseguir un mejor empleo), y otras son deseos (viajar, tomarse tiempo para uno mismo).

Para mantener bien tus buenas resoluciones, te aconsejo que te tomes el tiempo de reflexionar en qué categoría se encuentran tus resoluciones y cuán importantes son para ti.

Si te gusta hacer un vision board o tablero de visualización, establece periodos diferentes para tus objetivos por orden de prioridad.

4. Priorizamos la regularidad

Es mejor ceñirse a 15 minutos al día de deporte o meditación que hacer una gran sesión de varias horas el fin de semana y no hacer nada durante la semana.

Aprendí esta lección al aprender un idioma extranjero. Estudiando entre 20 y 30 minutos al día durante tres meses, pude alcanzar un muy buen nivel de comunicación oral sin demasiado esfuerzo.

Recuerda que el cerebro es un músculo y que trabaja mejor cuando está entrenado.

La regularidad abre el camino al éxito. Seguro que requiere un pequeño esfuerzo de disciplina, pero al aplicar la regla de los 21 días, una vez que tu buena resolución forma parte de tu rutina, ¡has ganado todo!

5. Hacemos lo mejor que podemos

Si hubiera una sola regla para alcanzar el éxito, sería esta. Hacer lo mejor cada día significa que seguimos trabajando mientras aceptamos que algunos días serán increíblemente productivos y que otros serán más difíciles.

Al hacer lo mejor cada día, tendrás la satisfacción de haber hecho todo lo posible para tener éxito y, ¡sobre todo, sin arrepentimientos!

Hacer lo mejor que puedes es, de hecho, uno de los cuatro principios básicos de los acuerdos toltecas.

Al adoptar estos consejos, avanzarás en tus proyectos, pero sobre todo, aumentarás tu confianza en ti mismo y eso no tiene precio.